Estoy recordando aquellos tiempos de bombo y platillo, todo era alegría y prisas muchas prisas, pareciese que el mundo iba a extinguirse.
Ya han pasado unas decenas de años desde que recibimos la «visita» de aquellos «extraños» artefactos y un inmenso depósito sobre sus inmensas ruedas, a todas horas nos encontrábamos con ellos, ya fuese de noche o de día, laboral o festivo, se apoderaron de nuestras calles, de nuestras ciudades, nuestros barrios. Era todo un torbellino de colores, esos extraños giraban y giraban con sus múltiples colores, sus siglas y anagramas. Con la llegada de esos extraños los ciudadanos fueron más felices, todo era parabienes, pareciese que había tocado el gordo de Navidad a gran escala.
Los extraños traían consigo bienestar, felicidad y alegría mucha alegría, eso si, con mucha prisa y mucha risa, la risa sobre todo la de los dueños de esos extraños artefactos, esos reían a bocajarro.
Entonces poca gente se encontraba desempleada, por no decir que parado estaba el que le daba la gana. Los currantes compraban coches, no importaba si más caro o menos, el piso y vacaciones estivales no faltaban, acudías al banco y pedías, — Cuanto desea Sr., decía el empleado o director de turno — 30 millones de pesetas, puede ser? — por supuesto, le contestaba el banquero, no desea también para un coche y para los muebles, quiere 40 millones mejor?— como?preguntaba el currante, eso es posible, si la vivienda está tasada en 25 millones de pesetas ( al poco tiempo, aparecería el euro, la ruina del currante ), — no se preocupe, no pasa nada, todo ira bien, aseveraban los banqueros, trabajo hay y habrá —. ( lo que no habrian serían años, ni trabajo ).
Que subía la luz, no pasaba nada, que todo subía, no pasaba nada, todo era alegría multicolor, mientras los extraños estuviesen con nosotros todo iría bien, había tantos miles de extraños que mientras estuviesen te podías permitir el lujo de solicitar aumento de sueldo sin gran problema, sino, huelga al canto, además para eso estaban todos afiliados a sindicatos, se contaban por millones los afiliados ( imaginen la de millones que recibían los sindicatos ), venga aumento de sueldo sin problemas — oye » currito» decía determinados empresarios, pero en nómina solo 800-1000 euros ( a todo esto que llegó el euro ) aunque percibiese el doble o más, que la cosa está muy mal y los impuestos me asfixian — y los sindicatos callaban y los cobros a destajos y horas extras se sucedían, y los sindicatos callaban y los gobiernos otorgaban.
Nada importaba, mientras estuviesen con nosotros los extraños monstruos mecánicos todo iba sobre ruedas y los extraños, corrían y corrían dando vueltas con sus bombos multicolores, y subió la luz de nuevo y el gobierno de turno, otorgó, para eso estaban los extraños multicolores, para que la vida la vieses color de rosa aunque te subiesen la luz.
La gente reía, saltaba, cantaba y sobre todo vivía, (¿ vivían por encima de sus posibilidades ?) todo era felicidad, los bares llenos a rebozar, — camarero!! , cuatro raciones de rebozado y cuatro jarras de cerveza — y porque tanta alegría y tanto jolgorio, a qué venía todo, era, La exposición universal de 1992, El Madrid Cultural y las olimpiadas de Barcelona, ahí es nada, toma ya, toma del frasco Carrasco ( buenos caracoles, tenía el bar Carrasco y buen adobo, esto viene a cuento, lo del bar y el adobo, porque me he acordado de mi barrio y porque me da la gana, para eso soy el que escribe ) por esos la visita de tantos miles de extraños, y no me refiero a los extranjeros que nos visitaron, no, me refiero a los extraños multicolores de bombo y platillo.
Termino la Expo, El Madrid cultural y las olimpiadas de Barcelona y volvió a subir la luz, maldita luz, siempre subiendo y vino una pequeña crisis, pequeña porque el euro entró en vigor y subió la luz con beneplácito del gobierno, y con el euro volvió la alegría y los extraños se quedaron con nosotros por más tiempo, volvimos a vivir bien, teníamos trabajo, gracias a Dios, gracias al dinero negro que afloró, había que gastarlo o no servía.
Entonces comenzó una desorbitada, increíble y atosigadora carrera laboral, se levantaban pueblos enteros, urbanizaciones por todos sitios, un desmadre, Mairena del Aljarafe llegó a ser el pueblo que más creció en toda Europa y subió la luz, y se vendían naranjales enteros, zonas de siembra y regadío se vendían por doquier para edificar y edificar sin control y subió la luz.
En el año 2007 todo era descontrol, fue el año más productivo después de los culturales y deportivos mencionados anteriormente para los extraños, que un día nos visitaron por miles y quedaron con nosotros.
Un año después sucedió algo que nos dejó perplejos a todos, los extraños, comenzaron a desaparecer, primero unas docenas, después unos cientos, después unos miles, más tardes casi no veíamos esos extraños multicolores, y con la marcha de ellos desapareció nuestra alegría, nuestras esperanzas y ilusiones se fueron, con la marcha de los extraños, explotó la
» burbuja» y subió la luz de nuevo, vino la hecatombe, los desahucios, la desesperacion, los suicidios………. Y la luz volvió a subir, con beneplácito del gobierno, gobierno de entonces, de ahora, y de mañana? Y subió la luz.
Qué pena y lastima me da dejar de ver a nuestros queridos amigos extraños multicolores, Que pena más grande, ya casi no vemos esos bombos multicolores con sus distintas siglas y anagramas, ya no vemos rodar por nuestras ciudades, pueblos y calle a los bombos de los extraños. LAS HORMIGONERAS, NUESTROS AMIGOS MULTICOLORES.
Hoy vuelve a subir la luz, según dicen un 33% y quieren que apaguemos 20 minutos la luz en protesta.
«pecata-minuta»
By: pinchitoandaluz.blog